Esta obra de E. Martí Zaro representa cualquier calle de cualquier ciudad del mundo. En una instantánea , la artista capta la luz y las sombras, las líneas y las geometrías y encuentra una composición perfecta. Las líneas verticales , casi como hendiduras en el muro, se equilibran con las horizontales formadas por los contrastes entre luces y sombras. Los contraluces y claroscuro, conforman una estructura en si misma .Todo ello compone una escena que a la artista le sugiere en un instante, una historia , un secreto, un misterio. Un momento que se perpetua en cualquier lugar del mundo.
Realizado en óleo y pastel sobre un papel hecho a mano le dan calidad matérica, corpórea y a la vez ligera .
El contraste entre las linea nítidas, solidas, rotundas y las delicadas transparencias de las sombras y luces , además del casi mono cromatismo , hacen que la obra sea rotunda.